Cuando se tiene testimonio de acontecimientos extraordinarios lo primero que se hace es explicarlo a nuestros amigos y familiares, éstos a sus conocidos y así sucesivamente. Algo parecido es lo que pudo haber pasado tras la Resurrección de Jesús.
LOS CUATRO EVANGELIOS
Marcos
El Evangelio de Marcos es el más antiguo. Fue redactado por una comunidad cristiana cercana al discípulo Marcos, muy relacionado con el apóstol Pedro. Su redacción definitiva se sitúa en una fecha en torno a la destrucción de Jerusalén por los romanos en el año 70 d. C. Se cree que se escribió en Roma y que se dirige, sobre todo, a cristianos no judíos. El tema fundamental es que Jesús es el Hijo de Dios. Se puede dividir en tres partes según el lugar de la acción de Jesús:
- Galilea
- El camino hacia Jerusalén
- La ciudad de Jerusalén, donde acaba con la pasión, muerte y resurrección.
El Evangelio de Marcos sirvió de inspiración para los Evangelios de Mateo y Lucas.
Mateo
Este Evangelio se escribió unos años más tarde que el de Marcos (hacia el 80 d. C.), probablemente en Siria, y aprovechó muchos materiales de éste, incluso su estructura en tres partes.
Mateo añade, antes de la primera parte, unos capítulos sobre la infancia de Jesús y el inicio de su misión. Pero la aportación más importante de Mateo es el uso que hace de unas colecciones de dichos y discursos de Jesús (la denominada fuente Q), que ya circulaban entre las comunidades. Con estos materiales, el autor elabora una obra muy bien estructurada y dirigida, principalmente a los creyentes que provienen del judaísmo.
El mensaje fundamental es que Jesús es el Mesías anunciado en el Antiguo Testamento.
Lucas
Este Evangelio se escribió entre los años 80 y 85 d. C. y tiene similitudes con el de Mateo en relación a la estructura y al uso de unos mismos materiales (Marcos y la Fuente Q), aunque tiene unas características propias: Es el Evangelio que contiene las parábolas de Jesús y es el que narra más apariciones de Jesús resucitado.
En realidad este Evangelio es la primera parte de una obra más amplia que incluye también el Libro de los Hechos de los Apóstoles, del mismo autor.
Está escrito en un griego elegante y está dirigido a comunidades de origen griego, como las que años antes había evangelizado Pablo. El mensaje principal es que Jesús es el Salvador y los apóstoles los continuadores de su misión.
Juan
Este Evangelio es el más reciente (entre los años 90 y 110 d. C.) y también el que más se diferencia del resto, ya que parece que no utilizó las mismas fuentes, sino que el núcleo del Evangelio son los recuerdos y reflexiones de un discípulo muy próximo a Jesús.
No se limita a relatar los hechos, sino que los interpreta mediante un lenguaje simbólico y siguiendo esta estructura:
- Diálogos y signos prodigiosos de Jesús enfrentándose al Judaísmo en Jerusalén.
- Largo discurso de Jesús a los discípulos, en el que les anuncia el futuro (acción del Espíritu Santo) justo antes de su muerte y resurrección.
La intención de la obra es remarcar que Jesús es el Hijo de Dios que se ha hecho hombre.