LUCIFER EN LAS TRADICIONES RELIGIOSAS Y ESOTÉRICAS


Origen del término y significado

Lucifer (del latín lux "luz" y fero "llevar": "portador de luz") proviene de la combinación del mito griego de Héspero (lucero verpertino, la personificación de Venus visto por la tarde) y Fósforo (lucero del alba, "el portador del amanecer", Venus visto al amanecer) y de la antigua dama oscura, Hécate (Diosa telúrica, de orígen pre-helénico, originaria de Asia Menor). En Tracia desempeñó el papel de gobernadora de los puntos relativos a tránsitos, entradas o umbrales y de lo salvaje. Tenía vínculos con el inframundo y la brujería en la Atenas clásica.

El término Lucifer fue empleado por San Jerónimo en la elaboración de la Vulgata (la versión en latín de la Biblia) al traducir de un texto de Isaías, el término hebreo "Helel"  que proviene de "brillar" y se ha traducido como estrella brillante (literalmente "resplandeciente"). Antes de caer, era el querubín protector, músico y el director de la alabanza a Dios. Su posición era la más alta de todos los seres angelicales que Dios creó. Estaba por encima de todas las categorías de los ángeles ya que era el más hermoso de todos. Aunque el sentido de esta definición se ha discutido porque el mensaje que contiene este texto está dirigido a un rey babilónico y que analiará en próximo post.

En general Satanás o Satán es el término por el que el judaísmo, cristianismo e islam designan a una entidad sobrenatural que representa la encarnación suprema del Mal. Otros lo consideran como el que desobedeció y se rebeló contra los mandatos de Dios. En la tradición de la Iglesia Católica y otras iglesias cristianas Satanás es sinónimo de Lucifer. 

Lucifer en las tradiciones religiosas

Su nombre Lucifer sería el que recibió de Dios en el cielo. Se le cambió por el de Satán (adversario), según la tradición cristiana, por estar en contra de Dios, y a causa de la adoración que reclamaba (Mateo 4:9).

Tradición cristiana

Lucifer representa al ángel caído expulsado del cielo por desobedecer y rebelarse contra los mandatos de Dios queriendo ser como Él, y como castigo, fue denigrado junto con el ejército de ángeles rebeldes que arrastró consigo, convirtiéndose en "Príncipe de los demonios". Ejemplo de belleza y sabiduría, su soberbia le condujo a los infiernos. Desde su rebelión es denominado "enemigo", "adversario", "acusador" (en arameo Satán -Satanás).

Judaísmo

Consideraba a Lucifer y a Satanás ("adversario": "ha-shatán) como dos entidades separadas. Este último aparece como mensajero ángel de Dios para realizar determinadas misiones o como acusador en tribunal; también como un ser que incita al pecado y es sinónimo de perdición, destrucción, malicia, y búsqueda del mal para los hombres.

Gnosticismo 

El gnosticismo es conjunto de corrientes filosófico-religiosas fusionadas que llegaron a mimetizarse con el cristianismo en los tres primeros siglos de nuestra era. Satanás es un terrible demonio, el demiurgo creador del mundo material (el Dios de los judíos según su mitología) y de la dualidad materia-espíritu, y Lucifer la sombra del logos (entendido como inteligencia o sabiduría divina), el tentador divino, el entrenador psicológico, aquel que pone a prueba al adepto para lograr la iniciación. Lucifer es el enviado del dios incognoscible que no puede penetrar en este universo limitado de materia impura y satánica. y que envió a Lucifer, ángel de fuego y de luz, para iluminar a los hombres, para ayudarlos a despertar y a conocer su origen espíritual, ya que están atrapados en la materia impura del cuerpo.

Masonería

Ha sido acusada de poseer una cierta tradición luciferina. Según algunos autores, la masonería enseña que Lucifer (también llamado Samael) fecundó a Eva dando lugar a los cainitas de los cuales descendió una larga estirpe. Los cainitas, forjadores del hierro, vendrían a representar a los intelectuales que hacen progresar el mundo y que dotan de libertad al hombre.

En la tradición judía, Samael es el Ángel de la Fuerza y uno de los siete regentes del mundo, servido por millones de ángeles. el Talmud dice que Samael es el ángel guardián de Esaú, antepasado legendario de los israelitas.

Teosofía 

La Teosofía es el movimiento filosófico-religioso y esotérico, que afirma tener una inspiración especial de lo divino por medio del desarrollo espiritual) considera que Lucifer, a quien llaman Metatrón (nombre de un ángel presente en el judaísmo y algunas ramas del cristianismo), es uno de los más importantes ángeles de la jerarquía celestial, y que no es el mismo Satán. Considera a Lucifer como uno de los Angeles solares, seres avanzados que descendieron y cayeron desde Venus a nuestro planeta para traer el principio de la mente al  el hombre-animal. El descenso de esos ángeles solares no fue una caída en el pecado o en la deshonra sino un acto de sacrificio, como sugiere el nombre de “Lucifer”, que significa portador de luz.

Satanismo

Si bien, los luciferinos no suelen considerase satanistas, muchos satanistas si se consideran luciferinos. El luciferismo es más un sistema de creencias que venera las características esenciales adheridas a Lucifer. Algunas personas identifican el luciferismo como un auxiliar del satanismo, debido a la identificación generalizada de Lucifer con Satán. Algunos luciferinos aceptan esta identificación y consideran a Lucifer como el portador del aspecto más liviano o positivo de Satán. Estos se inspiran en mitos antiguos de Egipto, Roma y Grecia y en el gnosticismo y ocultismo tradicional de Occidente.

Lucifer según los exorcistas 

Según algunos exorcistas como los Padrse Gabriele Amorth o José Antonio Fortea, Lucifer y Satanás son dos demonios distintos. Lucifer era el ángel más alto, la mayor obra de Dios antes de su caída, pero tras esta quedó en segundo lugar después de Satanás. Satanás es el más maligno de los demonios y supera en maldad a Lucifer.