Los teólogos cristianos afirman que el Espíritu Santo que es portador de dones sobrenaturales muy diversos que pueden transmitirse al hombre por su mediación. Un don sería bien material o inmaterial que Dios otorga a una persona para que pueda ejercer más fácilmente sus virtudes espirituales.
En una cita del profeta Isaías se enumeran los dones del Espíritu Santo:
11:2 Y reposará sobre él el Espíritu de Jehová; espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo y de poder, espíritu de conocimiento y de temor de Jehová.
12:8 Porque a éste es dada por el Espíritu palabra de sabiduría; a otro, palabra de ciencia según el mismo Espíritu; 12:9 a otro, fe por el mismo Espíritu; y a otro, dones de sanidades por el mismo Espíritu. 12:10 A otro, el hacer milagros; a otro, profecía; a otro, discernimiento de espíritus; a otro, diversos géneros de lenguas; y a otro, interpretación de lenguas.
Para los Cristianos no Católicos los dones del Espíritu Santo, según 1Corintios:
Estos dones se completan con los 7 "frutos del Espíritu" que aparecen en la Epístola a los gálatas de Pablo da Tarso:
5:22 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,
5:23 mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.
Todas los nombres, dones o frutos están implícitos en la expresión "Espíritu Santo" . A pesar de esta diversidad de nombres, en la teología cristiana no existe más que uno y un mismo Espíritu, y se muestra como ejemplo la cita de Pablo de Tarso en 1 Corintios 12:
12:4 Ahora bien, hay diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo.