EVOLUCIONISMO
En primer lugar analicemos en qué consiste lo que se conoce genéricamente como Evolucionismo:
El evolucionismo biológico es la teoría según la cual los seres vivos actuales proceden de antecesores comunes de los que han derivado por evolución biológica.
La evolución humana (u hominización) explica el proceso de evolución biológica de la especie humana desde sus ancestros hasta el estado actual.
El darwinismo no es sinónimo de evolucionismo, este último es anterior a Charles Darwin: las teorías darwinistas son evolucionistas, pero su aportación clave es el concepto de selección natural (en cuanto origen de las especies y su adaptación al medio) que permitirá la formulación de la teoría de la evolución actual o síntesis evolutiva moderna.
Síntesis evolutiva moderna o neodarwinismo: Significa la integración de la teoría de la evolución de las especies por selección natural de Charles Darwin, la teoría genética de Gregor Mendel como base de la herencia biológica (transmisión de las características de los organismos padres a sus hijos), la mutación genética aleatoria como fuente de variación y la genética de poblaciones (que estudia le frecuencia génica en los individuos de una misma especie).
ANTIEVOLUCIONISMO Y NUEVO CREACIONISMO
El creacionismo más reciente se basa en los descubrimientos o conocimientos de las ciencias naturales, que se presentan como pruebas científicas contrarias a la teoría de la evolución. Se habla así de "creacionismo científico".
Este tipo de creacionismo rechaza la distinción entre hecho evolutivo (parentesco y transformación de las especies a lo largo del tiempo) y la síntesis neodarwinista, que combina la unidad de la evolución (genes) con el mecanismo de la evolución, englobándolo todo con el término evolucionismo o darwinismo.
Diseño inteligente
Los partidarios de la teoría del diseño inteligente no se declaran como un movimiento explícitamente religioso. Su principal actividad consiste en negar la importancia de las explicaciones evolutivas sobre el origen de las estructuras biológicas, porque es necesaria su creación por intervención directa de un ser inteligente.
Creacionismo evolutivo
En una postura filosófica llamada evolución teísta; el creacionismo pro-evolución cree en la existencia de un creador y un propósito, pero acepta que los seres vivos se han formado a través de un proceso de evolución natural. Esta forma de creacionismo aspira a ser un complemento filosófico o religioso a la teoría de la evolución.
En lo referente a la opinión de la Iglesia católica, está de acuerdo con un creacionismo pro-evolución teísta, ya que no interpreta el Génesis de manera estrictamente literal, y no ve contradicción de la doctrina filosófica y religiosa de la Creación, que explica el origen del Universo a partir de la nada, con la teoría de la evolución biológica. Sin embargo, Benedicto XVI también indica que las ciencias naturales en general y la evolución en particular no pueden explicarlo todo.
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