ENOC. REFERENCIAS BÍBLICAS


Enoc (Enoch) es en el libro del Génesis, del Antiguo Testamento, el nombre de varios personajes mencionados en dos genealogías (ascendencia y descendencia de una persona o familia).

Aparece como primogénito de Caín (hijo de Adán y Eva), el primer ser humano nacido fuera del Paraíso y el primer fundador de un asentamiento humano. Y también como bisabuelo de Noé.

Según el Libro del Génesis, habría sido el único ser humano llevado y desaparecido de la mano de Elhoim.


5:18-30"Henoc anduvo con Elohim, y desapareció porque Elohim se lo llevó"; "Por la fe Enoc fue trasladado para no ver la muerte, y no fue hallado, porque lo trasladó Dios".

Este libro fue muy apreciado por parte de los primeros cristianos, como lo atestiguan la Epístola de Judas del Nuevo Testamento:

1:14 De éstos también profetizó Enoc, séptimo desde Adán, diciendo: He aquí, vino el Señor con sus santas decenas de millares, 1:15 para hacer juicio contra todos, y dejar convictos a todos los impíos de todas sus obras impías que han hecho impíamente, y de todas las cosas duras que los pecadores impíos han hablado contra él. 1:16 Estos son murmuradores, querellosos, que andan según sus propios deseos, cuya boca habla cosas infladas, adulando a las personas para sacar provecho.

Este texto se relaciona con pasaje del Libro de Enoc (1 Enoc, 1, 9): Mirad que Él viene con una multitud de sus santos, para ejecutar el juicio sobre todos y aniquilará a los impíos y castigará a toda carne por todas sus obras impías, las cuales ellos han perversamente cometido y de todas las palabras altaneras y duras que los malvados pecadores han hablado contra Él.

Y se dice en Pedro 2:4: Porque si Dios no perdonó a los ángeles que pecaron, sino que arrojándolos al infierno los entregó a prisiones de oscuridad, para ser reservados al juicio.

Referencias a Enoc se encuentran en múltiples versículos del Nuevo Testamento: Mateo, Marcos, Lucas, Juan, 1Corintios, Efesios, Filipenses, 2Tesalonicences, 1Pedro, Judas y Apocalipsis.


El Libro de Enoc (Enoc1, porque hay otros 3) forma parte de la Biblia de la Iglesia ortodoxa etíope pero no es aceptado por las demás iglesias cristianas, a pesar de haber sido encontrado en algunos de los códices de la Biblia Septuaginta.

La tradición atribuye su autoría a Enoc, bisabuelo de Noé. En la actualidad se cree que el texto fue redactado por varios autores judíos entre los siglos III a. C. al  I.

Muchos Padres de la Iglesia y cristianos destacados de los primeros siglos, consideraron el libro de inspiración divina. Un defensor de este libro fue el obispo Prisciliano, quien curiosamente fue el primer cristiano condenado a muerte y ejecutado por cristianos, por una supuesta herejía en 385.

Sin embargo, el libro fue definitivamente apartado del canon de libros bíblicos en el 364.

El LIbro fue dado por perdido en Occidente durante 1.000 años, aunque los francmasones de rito escocés tienen copias a finales del siglo XVIII.