EL MÁS ALLÁ EN LA MITOLOGÍA Y LA RELIGIÓN




El Más allá (vida tras la muerte) hace referencia a la continuación de la existencia después de la muerte. Según las creencias populares de la gran mayoría de culturas humanas, esta continuidad se realizaría en un mundo espiritual.

Para que exista el más allá, debe haber algo inmaterial que sobrevive al cuerpo en la muerte, que suele ser llamado alma o espíritu.



Mitología antigua

Sobre todo en la antigüedad, en las tradiciones religiosas o mitológicas, se han formado ideas sobre el más allá dispares. Por ejemplo, para los griegos Caronte esperaba en su barca para llevarnos al infierno, en la mitología germana hallaríamos, como héroes caidos en batalla, a las deidades femeninas denominadas Walkirias.

Para los egipcios el alma era pesada por Osiris (Juicio de Osiris); el corazón del muerto debía pesar menos que la pluma de la diosa Maat (que simbolizaba la justicia); el dios Thot, tomaba nota de si el sujeto obró bien o no en vida. Esta idea antigua, que relaciona nuestro lugar después de la muerte con nuestros actos y nuestra calidad como personas, es común en muchas mitologías y religiones. 

Otra visión de lo que puede ocurrir tras la muerte es la idea de reencarnación de los hindúes. Así, lo que experimentamos en esta vida, depende de lo que hicimos en la anterior, y de idéntica manera, lo que obtengamos en la próxima dependerá de lo que hagamos en ésta. 

Conceptos asociados al más allá

Testimonio de personas de un conocimiento experimental del más allá.
Haber muerto y haber sido enviados de vuelta a esta vida.
Haber visitado el más allá durante un periodo de inconsciencia (experiencia cercana a la muerte.ECM).
Haber visto el más allá durante una visión reveladora.
Tener el don de recordar una existencia pasada.

El más allá como recompensa o castigo

Muchas religiones afirman que tras la muerte la gente es recompensada o castigada en función de sus actos o su fe.

La noción del más allá común al Judaísmo, al Cristianismo y el Islam es que las almas humanas van por toda la eternidad a un lugar de felicidad o tormento, como el paraíso, el infierno, el purgatorio o el limbo. 
En la creencia popular de los cristianos, las almas de la gente virtuosa suben al Cielo. Pero las escrituras podría indicar que los muertos esperan hasta el Juicio Final, que irá seguido de la resurrección de los fieles.

Respecto a la eternidad de la otra vida, la vida normal es vista como una situación provisional:

Porque sabemos que si nuestra morada terrestre, este tabernáculo, se deshiciere, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha de manos, eterna, en los cielos (2ª Corintios 5:1)

Según el universalismo (rama liberal del cristianismo, dentro del ámbito protestante), todos serán premiados independientemente de lo que hayan hecho o en qué hayan creído. Afirma la salvación universal, en contraposición a la doctrina del infierno y la condenación eterna.